ESTA MUJER ENCONTRÓ UNA CARTA QUE TENIA 90 AÑOS ESCONDIDA; AL LEERLA QUEDO EN SHOCK CON LO QUE SU MADRE LE OCULTABA

ESTA MUJER ENCONTRÓ UNA CARTA QUE TENIA 90 AÑOS ESCONDIDA; AL LEERLA QUEDO EN SHOCK CON LO QUE SU MADRE LE OCULTABA

Unknown

El amor de una madre es una fuerza muy difícil de comparar con cualquier otro amor. Nunca sabremos de que son capaces las madres hasta que llegue la hora de ser una de ellas y es ahí cuando todos esos momentos que vivimos a lo largo del camino, toman un sentido completamente diferente.
Esta madre le escribió una hermosa carta a su hija para que la leyera cuando ella estuviese llegando al final de su camino. Lo que está escrito en ella seguramente te dejará tan conmovido como a todos nosotros, disfrútala:

ESTA MUJER ENCONTRÓ UNA CARTA QUE TENIA 90 AÑOS ESCONDIDA; AL LEERLA QUEDO EN SHOCK CON LO QUE SU MADRE LE OCULTABA

“Mi adorada hija:
En el momento en que te des cuenta de que cada día me voy haciendo más vieja sólo quiero pedirte dos favores: Paciencia y mucha comprensión. Trata de comprender que es lo que tiene que suceder y que es algo normal.
Cuando tengamos que conversar y repita las cosas una y otra vez, te pido que no me detengas diciendo: ¡Santo cielo, eso me lo has contado más de mil veces! Sólo te pido que me escuches y que recuerdes aquellos años cuando eras sólo una niña y yo debía leer tu cuento favorito una y otra vez hasta que dormías.
Si no quiero entrar a la bañera a la hora de la ducha por favor no me obligues o te avergüences de mí, porque no sabes cuantas veces tuve que correr tras de ti cuando eras pequeña y no querías bañarte.

 ESTA MUJER ENCONTRÓ UNA CARTA QUE TENIA 90 AÑOS ESCONDIDA; AL LEERLA QUEDO EN SHOCK CON LO QUE SU MADRE LE OCULTABA
Cuando te des cuenta de que me estoy haciendo vieja sólo te pido que tengas paciencia ante todo y que intentes entenderlo, si algún día estamos conversando sobre algo y de pronto pierdo el hilo de lo que venía diciendo, te pido que me regales un minuto para recordarlo, sin mirarme de arriba abajo o avergonzarte de mí. Tú debes saber cuánto te amo y que sólo quiero pasar el tiempo contigo.
Y si algún día mis piernas ya no tienen fuerzas para caminar, te pido que me des la mano como yo lo hice cuando tú diste tus primeros pasos. Por favor, cuando llegue este momento intenta comprender que estoy llegando al final de mi viaje y que estoy muy agradecida por todo lo que me ha dado la vida, por tu sonrisa, por tu amor y por los momentos que pasamos juntas. Sólo quiero decirte que ¡TE QUIERO HIJA MIA!
Nunca olvides lo que tu madre ha hecho por ti.
Comparte esta increíble carta con tus amigos y familiares y recuerda que amor como el de una madre sólo existe uno.